Después de 20 años, la Unión Europea (UE) reabre sus puertas a los cítricos orgánicos producidos en Argentina.
En los últimos días trascendió que la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea comunicó al Senasa (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) la aprobación del uso de bicarbonato de sodio como tratamiento de poscosecha para la exportación de cítricos orgánicos. De esta forma, quedó autorizada la exportación de estos frutos que, previamente había estado impedida debido a que la Argentina carecía de tratamientos poscosecha admitidos por las autoridades europeas: “Con esta medida queda autorizada la exportación de estas frutas, impedida hasta hoy, porque nuestro país carecía de tratamientos de poscosecha admitidos por las autoridades de la DG AGRI”, sostuvieron desde el Senasa.
La propuesta del organismo nacional de emplear bicarbonato de sodio está basada en la Resolución 374/16, que regula la certificación de la producción, elaboración y comercialización de productos orgánicos en nuestro país para llevarlos a estándares internacionales.
La medida tomada por las autoridades europeas supone un gran impacto positivo en lo que sería la producción de cítricos orgánicos, que hoy en día cuenta con más de 3.000 hectáreas cultivadas en el país, por lo que se espera un crecimiento en el desarrollo de esas economías regionales. Por su parte, el Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo, declaró: “Este logro del Senasa es parte del objetivo trazado en conjunto con el Ministerio de Economía: avanzar en el crecimiento económico, fortaleciendo la producción y a las economías regionales, llegando a nuevos mercados y afianzando nuestra presencia en los existentes. Estamos convencidos de que crecer implica producir más y para eso debemos tener políticas que fomenten las exportaciones”.
Entre los años 2001 y 2003, el Senasa certificó envíos a la Unión Europea por aproximadamente 2.500 toneladas de cítricos frescos orgánicos, más que nada naranja y limón. Los números del pasado permiten arrojar un poco de luz sobre lo que serían los números de exportación hoy en día, por lo que son varios los productores que, desde distintas partes del país, comienzan a entusiasmarse con este regreso de la producción argentina al continente europeo.