La ganadería argentina se encuentra en un momento positivo, más allá de los problemas que arrastró la actividad por la sequía y su consecuente faena. Si bien el 2023 fue negativo por razones climáticas, el 2024 podría convertirse en un año histórico para todo el sector. Así lo explicaron varios especialistas.
De hecho, en un evento organizado por ADBlick Agro, que se llama Dia del Socio Inversor y se realiza mensualmente, el consultor Fernando Canosa y la eminencia de la ganadería Victor Tonelli, se refirieron a lo que podría suceder con la actividad durante 2024. Ambos se mostraron muy optimistas de cara al futuro.
Por qué podría ser un año histórico para la ganadería
En base a lo que comentaron, hay tres factores de suma importancia que podrían derivar en un éxito sin precedentes. La primera clave será la exportación; la segunda, la demanda creciente de proteína a nivel global; por último, la opción de establecer un diagrama productivo en la que la pastura sea protagonista.
“Estamos en un momento histórico y muy especial para la ganadería”, comenzó a explicar Canosa.“Si ponemos los faros largos, la carne es uno de esos productos que falta en el mundo, y hay pocos países con posibilidades concretas de aumentar la producción. Argentina es uno de ellos, estamos en 3,2 millones de toneladas y podemos pasar rápidamente a más de 5 millones de toneladas”.
A su vez, detalló lo que ocurrió con el gran problema climático que sufrió el campo el año pasado: “Salimos mejor parados de la sequía comparando contra 2008/09, perdimos cabezas, pero en mucha menor proporción. El productor no dejó que las vacas se mueran y esto tiene que ver con la demanda de China e internacional en general”. “Se está pensando muy diferente el negocio ganadero”, añadió.
Tonelli, por su parte, se mostró en una línea similar, destacando que la nueva apertura de mercados beneficiará a la cadena de valor en su totalidad. A su vez, mencionó que las condiciones climáticas actuales, sumadas a las que se prevén para el 2024, tendrán un impacto positivo en la oferta forrajera, mejorando las recrías.
Acerca de la ganadería, Canosa subrayó: “Estamos en el mejor momento y en el mejor lugar para dar el gran vuelco”. De todas maneras, destacó que todo esto dependerá de lo que ocurra con la pastura: “Puede haber feedlot y lo hay, pero el 90% de la energía de cualquier bife viene del pasto. Así como tuvimos la revolución agrícola, hoy la gran deuda es la revolución del pasto. Tenemos productividad y tenemos calidad, hay que poner la tecnología para producir pasto”.
Finalmente, ambos coincidieron en que las exportaciones serán vitales para que el año sea positivo y para que el sector crezca. Sobre esto, destacaron la apertura del mercado de Israel.