En los últimos años, el campo atravesó una revolución en la que se apostó por la innovación a partir de distintas tecnologías, como la robótica. En la actualidad, la ganadería de precisión, una técnica novedosa que cada vez tiene más adeptos, está utilizando a los comederos inteligentes para detectar el consumo de cada uno de los animales que componen el rebaño.
De hecho, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) lanzó un comunicado en el que reveló las primeras conclusiones de un proyecto vinculado a los comederos inteligentes en el que se está evaluando la alimentación del ganado, en especial su mérito genético y su comportamiento, aunque estas no son las únicas variables de interés para los investigadores.
En qué consisten los comederos inteligentes y los proyectos en Argentina
Se trata de establecimientos tecnológicos en los que el monitoreo de la alimentación del ganado, especialmente el bovino y el ovino, son controlados para impulsar la ganadería de precisión pero también para conocer cuál es la necesidad de cada uno de los integrantes del rebaño. A su vez, tiene la posibilidad de adaptarse a otras producciones.
En el caso del INTA, el proyecto recibió el nombre de “Comederos inteligentes: innovación productiva y mejora de la cadena cárnica” y fue financiado por la línea PFIF-ESPRO (Proyectos Federales de Innovación Productiva – Eslabonamientos Productivos) del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología en la estación ubicada en Anguil, en la provincia de La Pampa.
“La tecnología del INTA busca determinar cuáles son los animales más eficientes en la conversión de alimento en kilos de carne. Contar con mayor información sobre el ganado da una ventaja comparativa y aumenta la velocidad y eficiencia en la toma de decisiones. El desarrollo de este tipo de tecnología permitirá gestionar mejor el sistema productivo”, explicaron en un artículo en la página web del organismo estatal.
Cabe destacar que proyectos como los comederos inteligentes tienen el objetivo principal de optimizar el uso de los recursos, aunque esta no es su única ventaja, sino que también son capaces de incrementar el precio de los animales (se calcula hasta un 20% en los terneros) a partir de la implementación estratégica de los recursos, en los que cada animal recibe una atención personalizada.
Por qué los comederos inteligentes están revolucionando a la ganadería de precisión
“Se trata de una tecnología pionera en el mundo, en la que el INTA Anguil incluye características propias de la región y busca dar solución a las múltiples problemáticas que se dan en el ámbito local. Por esto, el Centro Internacional de Innovación en Tecnología Agropecuaria (CiTA) otorgó el galardón de oro a los comederos inteligentes, en la categoría Sistemas de Automatización de origen nacional”, detallaron desde el INTA.
El beneficio de esta tecnología es que tiene la capacidad de medir con precisión cuánto alimento consume cada uno de los animales. En base a esto, se generan datos de suma relevancia para su crianza, como sus patrones de alimentación, algo que es vital para que crezca de manera saludable y productiva.
A partir de este acceso a la información, los productores podrán tomar decisiones específicas sobre los animales. Por ejemplo, la actividad más precisa para quienes aplican los comederos inteligentes es ajustar cada una de las dietas de forma personalizada, de modo que se optimizan los recursos pero también el crecimiento del ganado.
Gonzalo Arroqui, que es investigador en el INTA Naredo, que se halla en Buenos Aires, relevó la importancia de estos proyectos en su área: “La investigación se basa en un ensayo desarrollado en Naredo con la aplicación de comederos inteligentes, tecnología utilizada para mejorar la eficiencia mediante el uso de herramientas de trazabilidad y la obtención de información en tiempo real”.
Un ejemplo del éxito de los comederos inteligentes en Argentina
El establecimiento “La Tregua”, famoso por haber criado varios animales que se destacaron en competencias internacionales, ubicado en Córdoba, está implementando esta tecnología en sus procedimientos. Así lo confesó Daniel Bovetti, que trabaja como veterinario y que logró incrementar el valor de los terneros a partir de la información que los comederos inteligentes le proporcionaron.
Para alcanzar esta cifra, el especialista explicó que las balanzas de pesada al paso, así como también estos procedimientos correspondientes a la ganadería de precisión le permitieron seleccionar cuáles son los animales que requieren menos alimentos pero que logran convertirlo de manera más eficiente.
De hecho, en una entrevista periodística explicó cuáles son los beneficios de los comederos inteligentes: “Estas tecnologías nos permiten elegir animales con menor consumo y mayor conversión, lo que impacta positivamente en la descendencia. Así, la raza Limangus se diferencia y se vende a un valor superior”.
Por qué es importante la ganadería de precisión en la actualidad
Desde el INTA Anguil, donde se está llevando a cabo el proyecto en La Pampa, detallaron la relevancia de llevar a cabo un seguimiento de cada animal: “La medición exacta del consumo individual de alimentos, sumado a los datos precisos sobre la salud y el crecimiento de los animales, permite identificar a los individuos más eficientes y diseñar estrategias de alimentación optimizadas”, explicó Ricardo Garro, miembro del organismo.
Garro, que es responsable del proyecto de los comederos inteligentes, recomendó invertir en estas tecnologías porque ofrecen incontables ventajas a la hora de alimentarlos, lo que luego posibilita que los animales tengan un valor mayor en el mercado, como en el caso del establecimiento en Córdoba y sus terneros.
Por su parte, Arroqui reveló para qué utilizan la ganadería de precisión en Naredo: “Esto lleva a contar con datos precisos, y así es posible ajustar la dieta de cada animal para maximizar su crecimiento y salud, reduciendo el desperdicio de alimentos y optimizando el uso de recursos”. Cabe destacar que aquí también se utilizan balanzas al paso, ya que la información del peso es esencial en estas estrategias.