Como motivo de la celebración del 60° aniversario de Pemán Semillas, la compañía acaba de lanzar una nueva tecnología que tiene la capacidad de acelerar la implantación y la producción de pasturas. Su flamante creación recibe el nombre de Brachiaria Biocout y tiene la capacidad de incorporar nutrientes, como el zinc o el azufre.
Pemán Semillas nació en el 1964, en Sinsacate, en el norte de Córdoba. Desde ese momento, acompañó al sector agropecuario a partir del desarrollo de semillas y legumbres. Logró innovar en forrajeras subtropicales, sorgos híbridos, blends, alfalfas, cultivos de servicio, trigo y maíz, lo que le permitió tener alcance nacional e internacional.
Cuáles son las claves de la nueva tecnología de Pemán
Brachiara Biocout es una tecnología que logra transformar la producción de una pastura. Tiene mucho valor para los sistemas ganaderos, además de aplicarse como cultivo de servicio en el noreste (NEA) y noroeste argentino (NOA) durante las siembras que se llevan a cabo entre octubre y diciembre, en especial porque las tierras no son ricas en nutrientes.
Rosalba Pemán, vicepresidenta de la compañía e ingeniera agrónoma, explicó en qué consiste su nueva tecnología: “Nuestras Brachiarias Biocout se diferencian del resto, debido al tratamiento que le realizamos, incorporándole a las semillas microorganismos promotores de crecimiento que dejan disponibles nutrientes, como el fósforo, el azufre y el zinc”. Se trata de una pastura perenne tropical.
Pemán Semillas diseñó Biocout con microorganismos que tienen como objetivo potenciar el crecimiento, dejando que la pastura alcance su potencial en aquellos suelos que se encuentran entre una baja y mediana fertilidad. La finalidad es aumentar la producción forrajera a partir de la absorción de los nutrientes ya mencionados por la ingeniera agrónoma.
Lo principal detrás de esta invención es que puede llegar a lograr un incremento de la producción de hasta un 30% en su etapa inicial si se establece una comparación con otras brachiarias convencionales. A partir de esta estrategia, los productores pueden llevar a cabo una cobertura de los suelos mucho más rápida, apostando por un primer pastoreo de los lotes mucho más adelantado.
Cómo se debe realizar la siembra
De acuerdo a lo que comentó la vicepresidenta, el desarrollo de Pemán Semillas es clave para aquellos ciclos de producción en los que las precipitaciones son menores, algo que en Argentina se sufrió mucho la temporada pasada, donde la sequía perjudicó notablemente la calidad de la campaña agrícola.
Según sus estimaciones, las recomendaciones de siembra están dentro de los 8 kilos de semilla por hectárea, algo que es posible gracias a que las Brachiarias Biocout, al utilizarse como forrajeras, alcanzan una vida productiva mucho más prolongada. De todas maneras, dependen del manejo y de la región en la que se implanten.
En una entrevista, Rosalba mencionó la orientación que tiene esta tecnología orientada a acelerar la implantación: “Es una propuesta que va en sintonía con la sustentabilidad, debido a que genera un balance de carbono más positivo, puesto que el productor utiliza menos fertilizantes, protegiendo de esta manera el medio ambiente”.
Qué variantes presentó la compañía
Durante el lanzamiento, se enseñaron la Brachiaria Marandú, la Brachiaria Piata Biocout y la Brachiaria Ruziziensis Biocout. Las dos primeras fueron desarrolladas como forrajeras para la producción ganadera, en especial quienes lleven a cabo prácticas de pastoreo directo. Ya se pueden adquirir a través de su sitio web.
La Brachiaria Marandú es una gramínea perenne de más de 120 centímetros que crece de primavera a otoño. Entre sus capacidades se destaca su adaptabilidad a distintos suelos, su muy buena sanidad, su tolerancia al salivazo (que desde la compañía comparan con la chicharrita para los pastos).
La Brachiaria Piata Biocout también tiene la capacidad de crecer más de 1,2 metros y se destaca por su sanidad. Además de esto, posee las características para poder competir con las malezas, para incrementar la producción y garantizar calidad forrajera. Su mayor distinción es la relación entre hoja y tallo.
En cambio, la Brachiaria Ruziziensis Biocout consiste en un cultivar que se está implementando con más frecuencia en las regiones menos fértiles del NOA y del NEA. A diferencia del anterior, se aplica como cultivo de servicio para la agricultura, en especial en los lotes de maíz a través de una técnica que recibe el nombre de Sistema Santa Fe.
Es por esta razón que este último desarrollo de Pemán Semillas se siembra durante la primavera. Se destaca por ser una gramínea perenne que tiene un crecimiento decumbente y una buena tolerancia al sombreado. Es especial para suelos arenosos y francos y se puede aplicar para henificación, pastoreo directo y ensilado, además del ya mencionado Sistema Santa Fe.
En qué zonas de Argentina impacta más el desarrollo de Pemán Semillas
Pese a que los productores de todo el país pueden adquirir los servicios de la compañía oriunda de Córdoba, en algunas regiones su utilización es más necesaria, en especial como consecuencia de las características climáticas, geográficas y de la tierra. Por ejemplo, en la mayoría de las localidades de la Zona Núcleo tiene menos sentido que en el NEA o en el NOA.
De acuerdo a lo que contaron desde Pemán Semillas, las Brachiarias tienden a implantarse en aquellos suelos pobres de los nutrientes más básicos. Este es el caso del norte de Santa Fe, el este de Formosa, Corrientes y el este de Chaco, donde las tierras carecen de la cantidad necesaria de fósforo.
Como consecuencia de este problema, los agricultores tienden a fertilizar sus pasturas con muchas cantidades de este nutriente. Lo positivo del desarrollo de Pemán Semillas es que tiene la capacidad de solubilizar el fósforo que ya está presente en el suelo, de modo que se promueve su crecimiento radicular, disminuyendo la necesidad de incorporar otras técnicas.